La clase política argentina que durante 1981 y ante la debacle económica habían estado manteniendo reuniones y hablando de una posible salida democrática, era ninguneada por la junta militar que presidía Viola , pero había mejorado sustancialmente con la llegada al poder de Leopoldo Fortunato Galtieri.
Tras la retirada del poder de Videla, Galtieri viajó en función oficial , como comandante de las FFAA, a los Estados Unidos. La administración Reagan, lo describió como "general majestuoso", y parecido a George Scott en la película "Patton", o al menos eso es lo que describieron los diarios aquí acerca de su misión.
Al volver, Viola se aleja del gobierno alegando problemas cardíacos, pero todos sospechaban un golpe institucional en el que Galtieri asumió como nuevo presidente de facto , reteniendo su rol de comandante en jefe de las fuerzas armadas..
Una vez en el sillón de la Rosada, Galtieri desplaza a Sigaut , el ministro de economía que pidió no apostar al dólar, por el hasta entonces embajador en los EEUU: Roberto Alemann, en Obras Públicas a Sergio Martini, (ex administrador gral de Gas del Estado , ingeniero, vinculado a FIEL , IDEA, y Consejo Empresario Argentino), y en el Ministerio del Interior al Gral Saint Jean .
Galtieri da un discurso, donde deja claro lo que se viene: "un cuidadoso uso de la hacienda que no está para atender las exageradas necesidades de un ente burocrático (...) debemos redimensionar (...) He dispuesto que se aceleren los estudios ,ya hace tiempo iniciados, para la privatización de empresas ( ...) Por ello , he impartido órdenes, para que en un plazo no mayor de 120 días , se me presente un plan concreto de desestatización, (...) ,y que en 60 días se ponga en marcha un programa para la eliminación de organismos estatales prescindibles. (Publicado en La Nación el 24 de diciembre de 1981).
El regalo de Navidad de la nueva presidencia de facto, era acabar con el Estado , con sus controles, y con sus empleados.
Para despedir 1981, antes que descorcharan las sidras, el ministro Alemann, anuncia un aumento en el IVA de los productos básicos, que del 10% pasa al 12% y un congelamiento de sueldos para todos los empleados públicos (incluídas las FFAA) .
Según puede leerse en la página de la Dirección Nacional de Vialidad en :
" -Mayo de 1982, el Ministro de Obras y Servicios Públicos, Ingeniero Sergio Martini, comenta que se está provincializando o privatizando a los Puentes General Belgrano (Chaco – Corrientes), Zárate Brazo Largo y el Túnel Cristo Redentor (Argentina – Chile). El puente General Belgrano, que une Chaco y Corrientes, fue transferido a jurisdicción de dichas provincias el 11/05/82"
En tanto, la dirigencia política, estaba siendo invitada a participar de reuniones, con el Ministro del Interíor, Saint Jean, que les mostraba cual la zanahoria a un burro, la intención de elaborar un estatuto de los partido políticos.Con lo que la dirigencia civil, se mantenía en una oposición sumamente cautelosa para no embarrar la posibilidad de una apertura democrática.
La multipartidaria, formada desde julio de 1981 por el Partido Intransigente, el Partido Demócrata Cristiano , el Movimiento de Integración y Desarrollo, Unión Cívica Radical y el Partido Justicialista; a instancias del presidente de la UCR , Ricardo Balbín, presionaban con documentos como "La paz tiene un precio, es la Constitución Nacional" y exigían levantamiento del estado de sitio, puesta en vigencia del estatuto de los partidos políticos, etc.
Mientras los militares , revoleaban frases como "cualquier debilidad puede ser usada por el terrorismo latente... " "no caeremos en la imprudencia de que la Argentina pueda tener un rebrote terrorista" (La Nación, 3 de febrero de 1982)
En ese clima se llegó a la manifestación del 30 de marzo de 1982 convocada por la Multisectorial , CGT, entidades de Derechos Humanos y estudiantiles. (Aunque la CGT se arrogue los laureles, muchos actores sociales participaron de la misma y terminaron detenidos al igual que Ubaldini)
Ajuste, despidos y represión.
Manifestaciones públicas de "las urnas están bien guardadas" , concertaciones de entrevistas privadas político-militares . Que sí, que sí, que no , que no. Coqueteos y gritos.
A partir de Abril todo cambiaría.
Unidos, sí, somos más:
"Si quieren venir que vengan, les presentaremos batalla" bramó el 2 de abril del '82 frente a más de un millón de personas que lo vivaban en Plaza de Mayo.
¿De dónde salió toda esa gente aplaudiendo a un Galtieri , émulo de George Scott, que vociferaba en el balcón de la Casa Rosada?
Que las tropas argentinas , compuestas de militares profesionales, pero en su gran mayoría por adolescentes de 18 a 20 años , desembarcaran en Malvinas, habían obrado el milagro de hermanar a todos repentinamente.
Así, miembros de la Multipartidaria, sindicalistas apaleados dos días antes, el entonces gral y siempre genocida Videla , se subían a un avión con el ministro del interior para celebrar una misa (la iglesia siempre presente), en suelo malvinense.
Los atónitos como quien suscribe este blog, nos preguntábamos si estaban todos locos por ir a festejar una guerra. Otros, miraban con displicencia, pensando que era una puesta en escena. Otros , lloraban de emoción. TODOS éramos arengados desde las radios, transmisiones especiales de TV, diarios y revistas.
Entre esos todos y entre esos arengadores, se situaba la clase política argentina de ese entonces.
A continuación , algunas de las expresiones vertidas en la prensa por los dirigentes políticos , con motivo de la toma de las islas del Atlántico Sur.
Nicanor Costa Mendez, entonces canciller, años más tarde, escribiría en su libro "Malvinas. Esta es la historia" página 189 del libro, algunas de las múltiples adhesiones de parte de destacados dirigentes políticos: "Zavala Ortiz (UCR) manifestaba su solidaridad y absoluta adhesión a las medidas y pasos seguidos por la diplomacia argentina; Francisco Rabanal (UCR) declaraba que el episodio que vivimos fue anhelado por varias generaciones de argentinos...". Análogamente se expresaban Oscar Alende (Partido Intransigente), Rafael Martínez Raymonda (Partido Demócrata Progresista), Martín Dip (Partido Demócrata Cristiano) y Deolindo Bittel (Partido Justicialista). También señalaron su adhesión los dirigentes Acuña Anzorena, Ricardo Balestra, Mario Amadeo y Oscar Camilión.
Angel Federico Robledo (Consejo Coordinador de Acción Justicialista), en "Crónica" del 3 de abril de 1982, pág. 4: "Se han dado las condiciones para justificar la recuperación de la soberanía argentina en las islas por la vía de la fuerza. Emprendido este camino por el gobierno, el honor de la República está echado y detrás de la salvaguarda de ese honor están todos los argentinos sin distinción de banderías políticas".
Deolindo F. Bittel (vicepresidente del Partido Justicialista), en "Crónica" del 3/4/82, pág. 4: "Este hecho nos une a todos los argentinos y nos llena de alegría, porque en definitiva es la reinvindicación histórica de algo que es nuestro toda la vida... esperamos de aquí en más contar con la solidaridad internacional para reafirmar este hecho, lo que en derecho nos corresponde desde hace tantos años... a los argentinos a veces hay cosas que nos separa o nos dividen, hechos como éstos nos convocan a todos porque es un hecho histórico".
Rafael Martínez Raymonda (secretario general del Partido Demócrata Progresista), en "Crónica" del 3/4/82, pág. 4: "Apoyamos la firme actitud asumida por el gobierno, que significa también, la terminación de las dilaciones a que nos tenía obligados Inglaterra... si los ingleses hubieran tenido la inteligencia suficiente para haber reconocido con tiempo nuestros reclamos, no se habría llegado a una situación como la actual".
Alvaro Alsogaray, en "Crónica" del 03/4/1982, pág. 4: "He sido un poco sorprendido por el acontencimiento, si bien eso se estaba tramitando y ha habido un tiempo para meditarlo. Cuando se cuenta con el respaldo de un derecho tan indiscutible y tan universalmente reconocido como el que tiene nuestro país, todo esto no solo está justificado, sino que es imperativo".
Américo Ghioldi (Partido Socialista Democrático), en "Crónica" del 03/4/1982, pág. 5: "Me he sentido profundamente conmovido y lleno de gozo por la decisión de las Fuerzas Armadas, intérpretes fieles del sentimiento popular más profundo de los argentinos".
Documento de Línea Popular, en "La Nación" del 17/4/82, tapa: "Si bien el Gobierno no fue elegido por la ciudadanía, en este hecho cuenta con total consenso y es representante de la voluntad de los distintos sectores del quehacer nacional".
Carlos Menem (ex gobernador justicialista de La Rioja en ese momento), en "Crónica" del 03/4/1982, pág. 5: "Mi opinión se ha visto confirmada en los hechos. Era necesario recuperar las Malvinas y ante el fracaso de las vías diplomáticas se imponía la vía de los hechos... Felizmente las Fuerzas Armadas supieron escuchar el clamor del pueblo argentino".
Algunos , aprovecharon el espíritu fraterno, y pusieron hilo a la aguja;
Documento del Partido Justicialista, en" La Nación" del 18/4/82, pág. 10: "El país vive horas difíciles, luego de la legítima y justiciera recuperación de las islas Malvinas por las Fuerzas Armadas de la Nación... el asunto Malvinas es indudablemente prioridad uno de la Patria... unido a él, se encuentran otros cuya dimensión y naturaleza forman parte indisoluble de la propia identidad nacional... es necesaria la implementación de un verdadero plan de emergencia nacional con un cronograma efectivo y preciso, donde se establezcan en forma definitiva y tajante parámetros aseguradores de un gobierno representativo de la voluntad popular como de todos los sectores democráticos que son la razón de ser de la vida institucional en la República... ese será el mejor homenaje que se puede en estos momentos brindar a la patria, para asegurar en forma definitiva el cese de los desencuentros y la real unidad entre todos los argentinos"
Documento del Partido Demócrata Cristiano en" La Nación" del 18/4/82, pág. 10: "La recuperación de las Malvinas puede abrir un camino hacia la reconciliación y la unidad nacional sólo en la medida en que se adopten con urgencia decisiones en el plano interno que aborden con verdad, con justicia y con caridad, hondos problemas que aún laceran el alma nacional y abran el país a un sistema de libertad y de derecho en el camino hacia una rápida y ordenada institucionalización democrática argentina... sería saludable y ejemplificador en esta alternativa crucial en que debemos apretar fuerzas frente al enemigo, el juzgamiento de los responsables del desastre económico que aqueja al país, por la destrucción del aparato productivo nacional, indispensable para el desarrollo de las teras que demande la consolidación de la soberanía del Atlántico Sur... nos unimos a la voluntad fervorosa de nuestro pueblo que luchará si es necesario, formulando nuestro mejores votos por una paz con honor". Firman la declaración el presidente del partido, Hugo Conza, y los secretarios generales Martín Dip y Carlos Auyero.
Ya a partir de mayo, otros empiezan a llevar agua para su molino;
"Clarín", 30/5/82, pág. 22. El mismo documento exhortaba a los responsables de la conducción del Proceso "a extremar la apertura de los caminos tendientes a materializar dicha participación". Asimismo expresa que "las decisiones fundamentales en torno al conflicto armado, por sus proyecciones históricas, exigen la participación de todos los sectores de la comunidad... resulta imperativo adoptar las modificaciones necesarias para que la política económica se adecúe a las necesidades e intereses reales del país... la afirmación de la soberanía argentina sobre las islas Malvinas, Georgias y Sandwich del Sur ha sido una constante histórica del partido y que esa requisitoria hoy está acompañada por el esfuerzo de un pueblo que posterga sus legítimas reinvindicaciones en procura de ese objetivo nacional. La Unión Cívica Radical participa de ese esfuerzo sin declinar de su condición de partido en actitud crítica frente al gobierno".
Documento del Partido Socialista Democrático dirigido a la Internacional Socialista, en "La Nación" del 13/5/82, pág. 14: "El país entero sostiene la decisión adoptada... el pueblo argentino no admite ser propiedad de ninguna superpotencia, ni prisionero del colonialismo en ninguna de sus formas... la Argentina se ha unificado monolíticamente, lo que servirá en el plano interno para facilitar la marcha ya iniciada hacia la normalización institucional y el establecimiento de una renovada democracia representativa".
Carlos Contín (U.C.R.), en "La Nación" del 08/4/82, pág. 7: "Hay que demostrarle al mundo que esto no es una acción unilateral de las Fuerzas Armadas, sino que es del pueblo todo... Quizás se necesitaba un hecho de esta magnitud para darnos cuenta de que nos estamos sectorizando por problemas que no tienen la trascendencia que debieran". (what?)
Carlos Contín (U.C.R.) en "Clarín" del 30/5/82, pág. 22: "Nada mejor que una solidaridad auténtica ha de permitir que pese a todo, aún en la guerra, el espíritu republicano nos debe convocar a la democracia de mañana". (ahh, menos mal)
Carlos Contín (UCR) en "Gente" n° 881 del 10/6/82, pág.24: "La Argentina está ganando la batalla de Malvinas. Ha logrado concluyentes victorias militares dejando fuera de acción el 50% de la flota agresora... Siempre fuimos y somos un pueblo de paz... para ganar la paz podemos llegar hasta el fin que impone nuestro honor y dignidad... nada cederemos que nos corresponda por derecho" (Chan!)
Qué falta de respeto que atropello a la razón, cualquiera es un señor...
El enardecido "argentino" sr. Carlos Saúl Menem, quien habiendo llegado al poder,por el voto democrático, se olvidó de Malvinas; se dedicó a mantener su amistad tanto con EEUU; como con su política de desguace del Estado Nacional y continuó el proceso de privatizaciones que iniciara Galtieri en 1982. Para oprobio y repugnancia de la argentinidad bien nacida, durante su gobierno, el cuñado de Macri , el arq. Alberto Rossi, le vendería armas a Ecuador quien se hallaba en conflicto con Perú ; país que ofreció sus fuerzas militares a la Argentina durante la guerra de Malvinas. También protegería, con uñas y dientes, aún forzando la justicia, al hijo de Franco Macri, (quien comprara las armas para la guerra de Malvinas), porque había contrabandeado autopartes con su empresa Sevel (FIAT-Peugeot) con un perjuicio de 300 millones de dólares al Estado. Es decir, a todos nosotros.
Cantaría Discépolo, por no llorar, "en el mismo lodo, todos manoseados..."
